“El uso de cámaras es decisivo a la hora de poder luchar contra el delito en las ciudades”. Esta frase, repetida en varias de las presentaciones que el ex alcalde de Nueva York Rudolph Giuliani ha venido realizando en el último tiempo en países latinoamericanos ilustra cómo la tecnología se ha convertido en un aliado definitivo para los gobiernos en su propósito de garantizar la seguridad pública de sus ciudadanos.
No se trata sólo de sistemas de video vigilancia. Centros de control y comando unificados y plataformas para la prevención y monitoreo de emergencias, también forman parte de la estrategia con la que Giuliani, ahora uno de los principales voceros mundiales en temas de seguridad ciudadana, logró reducir la tasa de delincuencia en territorio neoyorquino en 56% y los homicidios en 81% entre 1993 y 2011, de acuerdo a Uniform Crime Report. El impacto de estas tecnologías en ciudades como Nueva York, Los Ángeles o Chicago ha sido notado por Latinoamérica, cuyas principales ciudades están también incursionando en la adopción de estas tecnologías.
De acuerdo con García, “los latinoamericanos estamos repensando nuestras ciudades. Hemos entendido que debemos cambiar, sensibilizarnos, actualizarnos y modernizarnos para hacer frente a las nuevas exigencias y nuevos retos que plantean las comunidades a los servicios ciudadanos. Hoy por hoy existen en la región una serie de oportunidades de provisión tecnológica que van desde la gestión de la seguridad pública y el seguimiento forense, pasando por portales ciudadanos con manejo integral de los registros vitales de la comunidad. Para todas estas inquietudes nosotros tenemos mucho valor que agregar y estamos trabajando e invirtiendo fuertemente en hacer la diferencia”.
A continuación, cinco ideas con las que se puede mejorar la seguridad ciudadana:
1. Comando y control unificado. Las ciudades requieren de un centro de unificación en el que estén todos los organismos operando. Éste debe contar con un sistema intercomunicado con todas las autoridades competentes con una línea única de emergencias, tal como se ha aplicado en Ciudad de Panamá, Bogotá o Montevideo. En Caracas, Smartmatic diseñó y montó un centro de comando y control a través del cual es posible monitorear condiciones ambientales y mantener un sistema de alertas tempranas. Posee un componente de televigilancia con el cual se puede monitorear 10 áreas críticas en la ciudad, además de un completo sistema de manejo de incidentes y rastreo vehicular que en conjunto con los demás elementos permiten ofrecer una respuesta más eficiente ante diferentes emergencias.
2. Despacho automático. Existen programas que ofrecen todo el ciclo de manejo de incidentes de seguridad, procedimientos de respuestas definidos, trazabilidad y auditabilidad en la ejecución de procesos; georreferenciación de eventos y control de flotas en tiempo real.
3. Monitoreo urbano. Plataforma de comunicaciones para mantener la supervisión audiovisual de las situaciones, en tiempo real. Esta solución permite un análisis computarizado de video y audio para detección y rastreo automáticos de emergencias.
4. Sistemas de seguimiento. Seguimiento en tiempo real de planes operativos. Permite la georreferenciación satelital, control de los recursos humanos operativos y el rastreo de activos (vehículos, armamento, equipos, etc.), con mapas operativos en tiempo real. Medellín, ciudad que fue seleccionada como la más innovadora del mundo de acuerdo al centro internacional Urban Land Institute, puso a disposición de la ciudad más de tres centenares de cámaras de vigilancia entre el centro y la periferia, además de un sistema de localización de vehículos de los organismos de seguridad y de una plataforma tecnológica de seguridad en línea, logrando ser un caso de éxito para la reducción de la violencia en la ciudad.
5. EWarnings. Permite capturar información de sensores de ambiente, tales como: Pluviométricos, electromagnéticos, inclusive sísmicos y de incendios, niveles de los ríos y quebradas, entre otros. Además de la generación de alertas tempranas, base estadística, entre otras funciones clave para que las autoridades y los organismos de control puedan tener supervisados posibles fenómenos naturales que afecten a los ciudadanos y sus bienes en las urbes.